Diario: Notitarde La Costa. Puerto
Cabello Edo. Carabobo. Fecha: 06-02-2015.
Columna: BioDazibao Global. p6. Autor: Wilfredo Jiménez Gómez.
Consultando el portal de la Fundación
Instituto Carabobeño para la Salud nos percatamos que esta institución tiene un
Programa de Salud Ambiental y entre sus objetivos está el control de la
esquistosomiasis o bilharzia. Esta es una enfermedad producida por un parasito el cual se
encuentra en aguas dulces, esta dolencia puede llegar a producir una
hepatoesplenomegalia severa, es decir, la inflamación del hígado.
La Organización Mundial de la Salud
define Salud Ambiental como "aquella disciplina que comprende aquellos
aspectos de la salud humana, incluida la calidad de vida y el bienestar social,
que son determinados por factores ambientales físicos, químicos, biológicos,
sociales y psico-sociales. También se refiere a la teoría y práctica de
evaluar, corregir, controlar y prevenir aquellos factores en el ambiente que
pueden potencialmente afectar adversamente la salud de presentes y futuras
generaciones".
En general la salud ambiental tiene
que ver con la relación hombre-ambiente; es en este contexto que toma
importancia la afirmación de Carcavallo y Plencovich en cuanto a que la
epidemiología es fundamentalmente una disciplina ecológica aplicada a la salud
del hombre. Por lo tanto desde una perspectiva ecológica los autores
mencionados definen la epidemiología como una “rama médico-social que estudia
los cambios en las interrelaciones del hombre con su ambiente y con otras
comunidades biológicas; las disarmonías de la dinámica poblacional entre
agentes, hospederos, vectores y susceptibles, y la significación de los
factores endógenos y exógenos en los estados de salud y enfermedad de la
sociedad humana.
En el contexto del litoral carabobeño
los conceptos anteriores son de mucha importancia, ya que la realidad ambiental
se caracteriza por emisiones atmosféricas, problemas de disposición de desechos
sólidos, quema de basura, escasez de agua, ruido automotor y vertido de aguas
negras a cielo abierto, entre otros problemas ambientales que afectan a la
población.
Créditos CO2
El
portal Infosyilva reseña que el Protocolo de Kyoto estableció el mecanismo de
descontaminación conocido como "créditos (o bonos) de carbono”, como
medida para reducir o contrarrestar las emisiones de gases de efecto
invernadero que inciden directamente en el calentamiento global. Cada crédito equivale a una tonelada de CO2 o
carbono que se deja de emitir o es absorbida gracias a mecanismos de
forestación o reforestación, y es objeto de comercio dado su valor monetario
asignado. En esta política, la clave del diseño y alcance de las iniciativas
radica en definir cuáles serán los mecanismos de distribución de estas
compensaciones económicas por el secuestro de carbono. Según la visión
gubernamental boliviana, el Estado Plurinacional y los pueblos indígenas y
comunidades campesinas deberían ser los receptores directos de estas
compensaciones económicas. Para viabilizar esta propuesta, Bolivia deberá
dotarse de una nueva política nacional de bosques que enfrente las causas de la
deforestación y degradación y contemple una estrategia específica para estos
mecanismos de compensación.
Especulación
Preguntamos hace pocos días el costo
de un examen de VDRL en dos laboratorios localizados en la zona, en ambos
informaron que era de 150 bolívares. El mismo examen costó 95 bolívares en un
laboratorio de Barquisimeto, ubicado en un megacentro comercial, donde
suponemos que el alquiler del local es mucho más caro que los arrendados en
esta región. La diferencia de precio es de 55 bolívares, es decir, un
porcentaje significativo de 36,7% más barato en comparación con 150 bolívares.
¿Especulación?, ¿mercaderes de la salud?
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